La inflación de los precios al productor de China se desaceleró en el último mes del año pasado gracias a las restricciones gubernamentales aplicadas a las industrias contaminantes, según cifras oficiales dadas a conocer hoy miércoles.
El índice de precios al productor (IPP), que mide los costes de los artículos a puerta de fábrica, subió un 4,9 por ciento interanual en diciembre, informó el Buró Nacional de Estadísticas (BNE).
El crecimiento del índice se ralentizó con respecto al 5,8 por ciento registrado en noviembre, de acuerdo con la entidad. Sobre una base mensual, el indicador subió un 0,8 por ciento.
En todo el año pasado, el IPP creció un 6,3 por ciento interanual, frente a la caída del 1,4 por ciento registrada en 2016, poniendo fin a la tendencia a la baja que dominó los últimos cinco años.
Con la llegada del invierno y la necesidad de que las regiones septentrionales del país recurran a los sistemas de calefacción, el gobierno ha redoblado sus esfuerzos para abordar el problema del esmog, pidiendo a las plantas y fundidoras de acero que suspendan la producción con el fin de reducir la contaminación. Dicha medida ha reducido la demanda por materias primas industriales.